Título: El día que se perdió la cordura
Serie: Cordura
Autor: Javier Castillo
Género: Novela negra / Thriller
Editorial: SUMA
Fecha de Publicación: 2017
Formato: Tapa blanda
Páginas: 456

Hoy hablamos de «El día que se perdió la cordura» de Javier Castillo. El primer libro que escribió y que lo lazó a la fama.

Sinopsis de El día que se perdió la cordura

Centro de Boston, 24 de diciembre, un hombre camina desnudo con la cabeza decapitada de una joven. El doctor Jenkins, director del centro psiquiátrico de la ciudad, y Stella Hyden, agente de perfiles del FBI, se adentrarán en una investigación que pondrá en juego sus vidas, su concepción de la cordura y que los llevará hasta unos sucesos fortuitos ocurridos en el misterioso pueblo de Salt Lake diecisiete años atrás.

Con un estilo ágil lleno de referencias literarias -García Márquez, Auster, Orwell o Stephen King- e imágenes impactantes, Javier Castillo construye un thriller romántico narrado a tres tiempos que explora los límites del ser humano y rompe los esquemas del género de suspense.

Opinión personal del libro

Es el primer libro que leí del autor y me sorprendió bastante, me pareció sencillo de leer y sobre todo muy ameno, el típico libro que empiezas un día cualquiera por la mañana y no puedes dejarlo de lado hasta que lo acabas por la noche con la boca abierta.

“Cambiaría el mundo, movería el cielo, y esperaría una eternidad para recuperar su recuerdo, su sonrisa. Sobre todo para recuperar la cordura, para redimir mi culpabilidad y para entender el sentido de todos estos años”.

La historia está escrita en diferentes épocas y ambientes, me gusta mucho cuando hacen este tipo de cosas porque te ayuda a ponerte en contexto y al final todo se une de forma que no te lo esperas.

Como he dicho, desde la primera página me tuvo enganchada, uno de los puntos que más me gustó fue el inicio, ya que no soy muy fan de las lecturas lentas y esta comienza con un hombre desnudo cubierto de sangre y una cabeza de mujer en la mano. ¿Una escena muy terrorífica verdad?. Años después aún no me olvido de ese comienzo y piensas… ¿Qué locura es esta?.

A partir de ahí todo fue en ascenso, más y más intriga y capítulos cortos, otro de los aspectos que más me puede gustar cuando leo un libro, porque te hacen querer leer más y más. Los tres saltos temporales convergen al final del libro para juntar todas las piezas, algo habitual en los libros de este autor que hace que quieras averiguar qué tiene que ver una cosa con la otra.

“Las motivaciones, muchas veces infravaloradas, son el motor de la conducta humana”.

Otro de los aspectos que me gustó bastante es que hasta el final no sabes al 100% qué pasa o cómo termina todo y eso me llevaba una y otra vez a vez a crear posibles teorías sobre el desenlace. Algunas cosas quedan sin resolver del todo, y es por eso que algunos lectores se quedaron un poco enfadados jajaja pero no os preocupéis porque tiene una segunda parte que es «El día que se perdió el amor» donde ata todos los cabos sueltos. No es el libro que más me ha gustado de él, pero le tengo especial cariño porque me hizo leer los siguientes que sí se han convertido en mis favoritos.

En definitiva «El día que se perdió la cordura», es un libro perfecto para salir de un bloqueo lector o simplemente para pasar un buen rato. Por lo tanto, sí lo recomiendo. Al final es el objetivo que tiene cualquier escritor, evadirnos del mundo real y meternos en el suyo.

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